jueves, 25 de septiembre de 2008

Tarde de 6ºd

La habitación se sabía plena de júbilo.
El adulterado humo invadía todo espacio posible y provocaba la risa fácil en los miembros reunidos.
El fondo musical, formado por la guitarra y las voces espontáneas, acompañaba de forma perenne y ayudaba a mejorar, más si cabe, la atmósfera creada.
A veces basta con poco para ser feliz.

3 comentarios:

Txe dijo...

Si hubiera usted escrito "hilo musical" en vez de "fondo musical", podría haber llegado a pensar que la escena era reflejada en palabras por el mísmisimo Victor Hugo, o José de Espronceda, sure.

Un abrazo, hombre.

isa dijo...

:)

a veces no, siempre basta con poco, lo que pasa es que nos cuesta darnos cuenta...

;)

ese 6ºB!!

isa dijo...

ups! me he equivocado de 6º... :S