Me dan tregua los domingos,
aunque nunca me dejen descansar:
unas insomnio,
otras vicios,
a veces, resaca emocional.
Nada de paella estos días,
nada de comida familiar.
Dolor de cabeza, revuelto intestino,
el alma se comienza a desangrar.
Tabaco mucho, café poquito
(recuerden: intestino), pero de calidad.
Estrellas: muchas.
Pensar dormido.
Se supone, el día de la trivialidad.
Me dan tregua los domingos...
Al final resulta
que me van a gustar.
Ahora o nunca
Hace 1 año
2 comentarios:
eyyy!!
una directora grandísima de este país escribió una vez que el domingo por la tarde era "ese estado entre la melancolía y la pura pena" y yo lo respaldo totalmente.
qué tal estás? todo bien? a lo mejor te veo la semana que viene porque estoy un poco cansada de tanta horchata y os echo de menos ;-)
1 besotee
hay huelga de versos en este blog?;);)
un besazo!:)
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